Número VI MMII Enero-Febrero

Duendes
La leyenda barda de Pwyll
La Cova da Serpe (Galicia)
Arboles y bosques mágicos

Susana García y Josep Ruiz (entrevista)
Perdonen que no me levante (relato)
¡Encuéntralo! Indice de Pergaminos

El viejo Tom Bombadil
y un servidor

por Chema G Lera

-- Más seres de leyenda--

Los Elfos

Los Elfos Oscuros

Murciélagos y dragones

Sirenas

Elfos del mar

Ninfas

Las Brujas

"Los hobbits empezaron a entender las vidas del Bosque, distintas de las suyas, sintiéndose en verdad extranjeros allí donde todas las cosas estaban en su sitio (p. 189)". Tolkien parece definir su obra literaria con estas palabras. Al mismo tiempo, describe la situación del lector. En "El Señor de los Anillos", todos los "vivientes" -reales o literarios- encuentran su lugar, único, irreemplazable. El lector es extranjero, no extraño, presente y ausente, su lugar consiste en pertenecer a la Gente Grande, innombrada, pero existente. El lector se mueve en un mundo que no es el suyo, pero donde debe estar.

Desde ese lugar, un servidor -o sea, el que se atreve a escribir esto ahora- se encontró un día, hace ya muchos años, a un singular personaje cuyo recuerdo me ha acompañado siempre, como una sombra cada vez que abro un nuevo libro, o cada vez que paseo por un bosque. Como "la" película lo ha obviado, he decidido rendirle este pequeño homenaje que comprende lo que sigue:

El libro y el lector, el creador y los personajes.
Donde se dice que la vida de un libro es la suma de las vidas de sus lectores, y que un gran libro es aquél capaz de vivir una larga vida propia.

Mi relación con los personajes.
Donde se dice que el mérito de Tolkien consiste en conseguir que cada una de las naturalezas que ha creado se manifieste a través de personalidades individuales y se pregunta qué hacer con un personaje que goza de una libertad quasi total hasta casi desligarse de su creador.

Un encuentro casual en el Bosque de las Letras.
Donde aparece bajo un sombrero con pluma azul, Tom Bombadil.

¿Qué pinta aquí ese personaje?
Donde se plantea esta paradoja desesperante: hay un ser con un poder enorme que sólo se preocupa por la felicidad de su amada, mientras que unos pequeños hombrecillos, amantes de la comida y la tranquilidad, han recibido la responsabilidad de cumplir una misión universal.

Tom es el amo.
Donde se le llama a Tom "Master", "El Antiguo" y uno de los "Maiar".

Tom es un sujeto sencillo.
Donde se habla de los niños y las niñas, de los adultos, de algunos críticos y de las aventuras de Tom Bombadil.

Epílogo y un par de enlaces.
Donde el autor recuerda de dónde viene lo que ha escrito y pide disculpas a los sabios por su atrevimiento, al tiempo que recomienda alguna página que sí que merece la pena.

Las citas del presente artículo están tomadas de El Señor de los Anillos, Tomo I. La comunidad del anillo. Ediciones Minotauro, 1977, Buenos Aires.

portada
© copyright 2002 de los autores
© copyright 2002 Chema Gutiérrez Lera
Revista ELFOS
w w w . e l f o s . o r g