Luisa Miñana |
El pasado seis de noviembre de 2001 tuvo lugar la inauguración de las obras de restauración y consolidación del conjunto arquitectónico y escultórico de la capilla de San Bernardo, situada en el interior de la Seo de Zaragoza. Devuelta a un esplendor que permite por fin apreciar con garantías la calidad artística de las obras en ella contenidas, conviene en este momento llamar de nuevo la atención sobre dicho particular, como ya se ha hecho anteriormente en otros foros y en otras ocasiones. Parece preciso recordar que, sin menoscabar las otras muchas magníficas realizaciones artísticas con que cuenta la concatedral cesaraugustana, ésta de la capilla funeraria del arzobispo D. Hernando de Aragón y su madre, es sin duda una de las más excelentes y testigo excepcional de la relevancia alcanzada por el arte aragonés del Renacimiento, y en particular por la escultura, a lo largo del floreciente siglo XVI. |
Relieve: Medallón de la Adoración de los Pastores |
El Arzobispo Don Hernando de Aragón y la Capilla de San Bernardo El sepulcro de Don Hernando de Aragón |
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