"En las orillas del cielo" José Verón Gormaz. Tropo Editores. 2008. |
Un libro nuevo de José Verón es siempre una gran noticia. "En las orillas del cielo" (Tropo Editores, 2008) se ha presentado recientemente en Zaragoza y es un libro de temblores. Forma parte de la Trilogía del tránsito y la duda, junto con "El exilio y el reino" (P.u.Z., 2005) y el "Jardín transparente" (en vías de publicación). Los poemas de este libro de José Verón están aquilatados hasta el máximo, y no hace falta más. Verso sutilmente medido, ritmo tenue, susurro como no queriendo: y el poema surge, se dibuja, se hace corpóreo y nos mira a los ojos: prende el reconocimiento y tan sólo han mediado unas pocas palabras. Una pulsión. En la oscuridad más sensible. El libro está estructurado en tres partes, precedidas de bien significativas citas: la primera "Tengo una llave/ y abro la puerta: entro/ y está oscuro; entro / y está más oscuro. Entro." (Mark Strand) la segunda "El tiempo que destruye es el tiempo que acoge" (T.S. Elliot) la tercera "El fruto está ciego. Es el árbol quien ve" (René Char). Espléndidamente elegidas, como se sabe tras leer el libro, estas citas fijan el tránsito melódico del conjunto, bajo una concepción casi clásicamente platónica del acto creativo: el poema existe, está a la espera, crea un territorio a donde el poeta que hace transitable el tiempo mutable y breve, quiebra la oscuridad y puebla el silencio y la melancolía como formas de conocimiento. Temas eternamente literarios, que José Verón revitaliza con una cercanía personal, absolutamente humana, tan humana como lo es el hombre contemporáneo. Tres historias ¿Estás viendo las llamas? ¿Oyes los estallidos? En los pueblos que gobiernan los dioses. el diablo hace fortuna. Viejos presentimientos Era un día extranjero. El tiempo se asomaba con la bruma, como sombras de espíritus remotos que esparcían presagios en el viento. Era un oscuro día luminoso de augurios. Era un día soñado por mis palabras. Las orillas del cielo Alas de oscuridad Cae sombra transparente sobre lo indefinido. El mundo de las formas se estremece. |
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© 2008 El Cronista de la red
Versión 16.0- Enero 2008