Pablo Gargallo |
Romántica El éxito se repetirá unos meses después en Barcelona y también en Reus, donde la exposición de Gargallo se inaugura sólo tres días antes de su muerte, la cual se produce precisamente en esa ciudad tarraconense, el 28 de diciembre. La siempre precaria salud del escultor de Maella se había quebrado definitivamente, después del esfuerzo ingente que ha supuesto el trabajo de los últimos años de su vida y la preparación de las exposiciones individuales que, paradójicamente, le auparon definitivamente al lugar merecido dentro del panorama artístico mundial. Tanto las subsiguientes exposiciones de Madrid, otra en Barcelona, y la retrospectiva que le dedica el Salón de Otoño de París de 1935 tendrán ya, por tanto, carácter póstumo. Mucho se ha escrito desde entonces -y ya durante los años de vida del escultor- sobre el carácter de la obra de Pablo Gargallo y de él mismo. Traeremos, entre todo ello, aquí las palabras de otro aragonés, José Camón Aznar. "Aquí está, ante nuestra vista, la gran revolución del arte moderno: el vacío ha sustituido al volumen macizo en la escultura. Ha caído como fronda inerte todo lo que era masa indiferenciada, y han quedado solos, como montados al aire, como puros nervios tensos, los rasgos expresivos. Lo que no lleva en sí una vibración espiritual ha sido eliminado. Y se da la paradoja que ha podido realizarse gracias a la genialidad de Gargallo, de que estas esculturas, abiertas a todos los vientos, vaciadas de materia, con filamentos que se doblan y exasperan, dan una impresión de realidad más viva que el volumen tradicional. Todo está exhalante, irradiando anhelo, incorporándose con gritadora eficacia al alma del contemplador " (ABC, 30 de noviembre, 1971 en "Gargallo, 1881-1981. Exposición del centenario", pág. 53.) Pocos fueron los años que Pablo Gargallo anduvo en tierras de Aragón. Sin embargo, cuando se leen sus propias reflexiones acerca de las bases que animan su impulso creativo, no se puede dejar de reconocer en gran medida los rasgos de la idiosincrasia de su tierra natal: "Yo he hecho muchas cosas cuyo resultado ha podido parecer pobre, pequeño, pero jamás vacío o falso. Esta es la justificación de mi estética en los hierros: síntesis, exigencia, amplitud y libertad."
|
Bibliografía: Rafael Ordóñez Fernández: "Museo Pablo Gargallo". Ayuntamiento de Zaragoza, 1994. Catálogo de la exposición "Gargallo. Exposición del centenario, 1881-1981". Ayuntamiento de Zaragoza, 198 La imagen del estudio de Pablo Gargallo en, "Gargallo. Exposición del centenario, 1881-1981". Ayuntamiento de Zaragoza, 1981, y la imagen de la esculturas "Urano"(pie de páginas), "Academia", "Romántica" y del recortable "Bailarina" en "Museo Pablo Gargallo". Ayuntamiento de Zaragoza, 1994. |
Inicio |
©2006 El Cronista de la red